Padre te quiero pedir que en este momento me llenes de mucho amor para que mi corazón esté sano y no tenga los altibajos que me producen el miedo y que me hacen equivocarme una y otra vez.
Gracias por la ayuda que me das y por hacerme consciente de todas mis capacidades y cualidades.
Te suplico que me ayudes a comprender que toda decisión implica renuncia y compromiso.
Que no tenga miedo de asumir las renuncias de mis opciones contigo, que esté dispuesto al sacrificio que implican tantas situaciones de la vida.
Necesito de tu paz y de tu amor, por eso en este momento abro todo mi ser y quiero recibirlas.
Hoy quiero sentir que la alegría de tu presencia recorre mi ser impulsándome para mañana levantarme con ánimo y a salir a dar lo mejor en cada una de las batallas que hay.
Te amo y estoy seguro que mientras duermo tú estarás sanando mi ser para que mañana esté listo para continuar.
Necesito de tu fortaleza para que nada me haga daño y para que todo lo pueda vencer en tu nombre.
Señor, que en los momentos difíciles pueda descubrirte y que pueda ver que tú eres el camino verdadero que lleva a la vida y a la verdadera felicidad.
Cada latido de mi corazón te lo entrego para que sea una alabanza para ti.
Te amo y confío en tu bendición poderosa y me acuesto a dormir con la seguridad de que estarás a mi lado cuidándome.
Bendice a los que amo y llénalos de tu amor, de tu fortaleza y de tu presencia para que puedan descubrirte siempre.
Amén